El Estudiante y las Artes marciales.

Un estudiante de artes marciales debería con el tiempo con los años ser virtuoso en el trato con el resto de las personas. Un estudiante de este noble camino, nunca debe albergar en su corazón una actitud arrogante, violenta, poco asertiva etc. El Budo debe ser un medio para la evolución personal continúa, a través del entrenamiento de la técnica. Creo que el respeto y cortesía que ostentamos dentro del dojo, debe llevarse a la vida cotidiana. Hoy quiero escribir sobre la empatía y la asertividad , virtudes que debe practicar y desarrollar un artista marcial. Un estudiante de Budo debe ser capaz de entender y comprender al otro, esto lo logramos en el dojo a través de la práctica continúa de entrenamiento físico y técnico. De esta forma podemos conocer el dolor que produce un golpe en nuestro cuerpo y entender lo que le ocurre a un adversario, tomando conciencia de esto deberíamos ser capaces de llevarlo a nuestra vida cotidiana en todo ámbito. Para poder ser asertivo debo tener una auto estima alta, relacionarnos con los demás de igual a igual, sin arrogancia y respetando para

que te respeten. Demasiada humildad es malo y poco asertivo, la pasividad nos conduce por un camino sin derechos y al final pasamos a ser esclavos de las afirmaciones y actitudes de otras personas. Vivimos en una sociedad donde se confunde la agresividad , la falta de empatía y la poca asertividad, con una persona segura de ideas claras y auto estima alta. Creo que es lo mas alejado de la realidad. Un verdadero artista marcial, debe transitar por el camino de la conciencia despierta y entrenar con perseverancia, darnos cuenta de quienes somos, en forma honesta y así llegar a transformarnos en guerreros con fuentes.